¡Tienes una carta! ¡Y es de Tomi Ungerer!
Ellen Duthie
El pasado viernes falleció el autor e ilustrador Tomi Ungerer, una de esas figuras a las que en inglés se las llama, no siempre con la mejor de las babas, “larger than life”, más grandes que la vida misma.
Para el equipo de Wonder Ponder, Ungerer fue muchas cosas. Primero, como lectoras, fue el autor de algunos de nuestros libros infantiles favoritos. Ningún beso para mamá, Los tres bandidos, El ogro de Zeralda, Flix, Críctor, El hombre luna, La bestia del señor Racine… por nombrar unos pocos.
Por otro lado, Ungerer también tenía una relación especial con las preguntas, como nosotras. Éramos muy fans de sus respuestas ilustradas a preguntas filosóficas de niños en Philosophie Magazine que el año pasado se recogieron también en un libro: Ni oui ni non.
Como autoras, Ungerer es siempre una referencia gráfica y un modelo de descaro a tener presente y los lectores atentos descubrirán más de un homenaje escondido -o no tanto- en nuestros libros.
En el póster incluido en Mundo cruel, el que lo busque encontrará a nuestro querido Tony Zarpas (Piper Paw en el original inglés) de Ningún beso para Mamá.
Y en el póster de Lo que tú quieras, en la que se despliega esa Casa de la Real Gana, es fácil ver quién la preside, con su tesoro reunido en el ático.
Pero Tomi Ungerer fue también algo más para nosotras.
Un día se nos ocurrió enviarle nuestros libros y nos pusimos en contacto a través de su cuenta en Twitter con su hija, que muy amablemente nos dio su dirección. En aquel momento solo habíamos publicado dos títulos, Mundo cruel y Yo, persona, y se los enviamos los dos, firmado-dibujados, y con una carta invitándole a encontrar algún que otro guiño que habíamos escondido para él.
No tardó en llegar el mensaje de su hija: “Hola, acaba de llegar vuestro paquete y se lo entregaré a Tomi mañana así que ¡justo a tiempo! ¡Me ENCANTA lo que habéis hecho!”.
Y, al día siguiente, otro mensaje: “¡Le encantó! (con esta foto)”.
Creemos recordar que dimos gritos. Nos emocionó y sobre todo, nos pareció tremendamente generoso por su parte.
Y ya nos dábamos por unas requete suertudas cuando, unos días más tarde, recibimos una carta manuscrita de Tomi Ungerer, salpicada de sellos con algunos de los lemas que, al parecer repetía cada dos por tres casi como un mantra. “Expect the unexpected”, “Don’t hope, cope”.” En souvenir du futur… “ En la carta en sí, nos dice varias cosas, pero principalmente dos: que Wonder Ponder debía estar en todas las escuelas y que esperaba que siguiéramos con el proyecto.
Puede parecer una tontería insignificante y no nos cambió la vida, claro. Pero que un autor consagrado y al que admiras se muestre así de generoso con su tiempo y sus palabras no es algo que ocurra todos los días y es algo MUY alentador. Muchas gracias por el aliento, Tomi. Y por tus libros, más.
Y os dejamos con un librito no muy conocido de Tomi Ungerer, con preguntas maravillosamente absurdas y divertidas.